Los pisos plásticos calados son una opción versátil que se adapta a cualquier entorno, sea industrial o comercial. Este producto brinda seguridad al transitar por zonas resbalosas como piscinas, cocinas, gimnasios, saunas, terrazas y zonas de trabajo de tráfico pesado.
La resistencia a la abrasión, el peso ligero, la buena resistencia mecánica y la tenacidad del plástico son ventajas técnicas clave para su uso en aplicaciones comerciales e industriales.
Proporciona un paso suave. Los trabajadores o las personas que transiten por él, verán cómo sus pasos se amortiguan más con estos pisos, dándole a las rodillas un poco más de confort. Además, puede prevenir que elementos frágiles se rompan si se caen, pues la superficie es mucho más suave que la de concreto.
- Duraderos: los pisos plásticos son resistentes a la descomposición química, a la corrosión, a los golpes y a la abrasión. No se ve afectado por las temperaturas, es resistente a los ácidos inorgánicos, aceites, grasas, detergentes, salmueras y la mayoría de los disolventes orgánicos. Se limpian fácilmente con agua y continúa matando gérmenes por lo que los olores, el moho y los hongos no tienen ninguna posibilidad de aparecer.
- Fácil limpieza.
- Encastrables desde todos sus lados. Permiten su colocación en superficies no homogéneas.
- Buen aislante: al ser de plástico, los pisos de este material no conducen la electricidad, por lo tanto, es un material excelente para usar en aplicaciones eléctricas, como el revestimiento de aislamiento para cables.
- Económico: como material es muy competitivo en términos de precio, este valor también se ve reforzado por las propiedades, como su durabilidad, vida útil y bajo mantenimiento. En el mercado puedes encontrar varios tipos de pisos plásticos y acá te decimos cuales hay, para que elijas el que mejor se acomode a tus necesidades.
- Fabricados en diferentes materiales: se adaptan a cada requerimiento en particular. Aptos para cámaras de frío, pueden estar en contacto con alimentos.
